De las Cenizas a la Esperanza, una incansable labor en Viña del Mar
Las llamas devoraron gran parte de la población de Viña del Mar. Un infierno en la tierra que dejó un rastro de destrucción y dolor se extiende por la ciudad, donde más de 132 personas perdieron la vida, mientras que decenas resultaron heridas y otras tantas permanecen desaparecidas.
Casas en ruinas, vehículos calcinados, campos de cultivo reducidos a cenizas, un panorama desolador que refleja la angustia y el dolor de miles de personas que lo perdieron todo.
Los habitantes de Viña del Mar han visto con profunda tristeza cómo en poco tiempo el fuego ha consumido todo lo que con tanto esfuerzo han conseguido a lo largo de muchos años de trabajo.
Desde el primer momento, el equipo de voluntarios de la ONG REMAR en Chile se movilizó con recursos para brindar ayuda y auxilio a los damnificados de este desastre..Camiones cargados con agua potable, alimentos no perecederos, ropa, mantas y colchones se abren paso entre las calles devastadas, llevando consigo un mensaje de aliento y solidaridad.
Las manos solidarias de REMAR se extienden para socorrer a tantas personas que necesitan de toda la ayuda, niños, hombres, mujeres, ancianos, familias completas que se han quedado sin un techo donde refugiarse y sin recursos para alimentarse y seguir adelante.
