El peligro para 2025 // Daniel Del Vecchio
Al cerrar un año y mirar hacia el siguiente, el mensaje de Daniel Del Vecchio nos invita a reflexionar sobre un peligro cada vez más evidente en los tiempos actuales: el engaño. Este no es un asunto menor, sino un desafío que afecta a la iglesia de Jesucristo y a todos aquellos que buscan caminar en la verdad.
Un Corazón Engañoso
Del Vecchio nos recuerda que el corazón humano es engañoso. Muchas veces, lo que sentimos o escuchamos puede no estar alineado con la verdad de Dios. En un mundo saturado de información, donde se escuchan tantas voces en la televisión, las redes sociales y otros medios, ¿cómo podemos discernir qué es verdadero? La respuesta es clara: debemos regresar a las Escrituras, porque solo en la Palabra de Dios encontramos un fundamento seguro.
Las Señales de los Tiempos
En su mensaje, Daniel cita Mateo 24:3-13, donde Jesús advierte sobre las señales que precederán su venida. Estas incluyen guerras, hambres, pestes, terremotos y, sobre todo, el engaño. “Mirad que nadie os engañe”, dice el Señor, enfatizando que muchos vendrán en su nombre para confundir y apartar a los creyentes de la verdad.
El engaño también está vinculado a la apostasía, cuando el amor de muchos se enfrió. Del Vecchio subraya que esto no solo afecta a los no creyentes, sino también a la iglesia misma. La perseverancia hasta el fin es una evidencia de una fe genuina y viva.
La Guerra Espiritual
Estamos en medio de una guerra espiritual, una lucha entre la verdad y la mentira. El enemigo, identificado como el padre de la mentira, trabaja incansablemente para cegar y confundir. Pero el antídoto para este ataque es el amor por la verdad. No se trata solo de conocer doctrinas o teologías, sino de recibir una revelación personal de la verdad en nuestro espíritu.
La Venida del Anticristo
El mensaje también aborda la manifestación del hombre de pecado, el Anticristo. Según 2 Tesalonicenses 2, este individuo se opondrá a Dios y buscará engañar con señales y prodigios mentirosos. Sin embargo, antes de su llegada, la iglesia enfrentará un tiempo de tribulación. Del Vecchio advierte que no debemos ser llevados por doctrinas que prometen escape fácil, sino estar preparados para perseverar y mantenernos firmes en la verdad.
Armados con la Luz
La verdad es nuestra armadura contra las mentiras del enemigo. En Juan 3:19, Jesús declara que “la luz vino al mundo, pero los hombres amaron más las tinieblas”. Este versículo nos desafía a amar la luz, a buscar la verdad y a vivir en ella. Al hacerlo, no solo encontramos libertad, sino también comunión con Dios y con los hermanos en la fe.
Un Llamado a la Acción
El mensaje concluye con un llamado urgente: amar y buscar la verdad, ser llenos del Espíritu Santo y no dejarse llevar por el error. La verdad no es solo información, sino una persona: Jesucristo. Él es “el camino, la verdad y la vida” (Juan 14:6). Al caminar en la luz de su Palabra, estaremos protegidos del engaño y preparados para enfrentar cualquier desafío que venga.
Oración Final
En sus palabras finales, Del Vecchio invita a los creyentes a orar:
“Señor Jesús, quiero ser libre. Tú eres la verdad y la luz del mundo. Guíame, líbrame de la mentira y ayúdame a amar tu palabra. Lléname con tu Espíritu Santo y dame un corazón dispuesto a obedecerte siempre. Amén”.
Al entrar en un nuevo año, recordemos este mensaje y hagámoslo parte de nuestra vida diaria. Que nuestra fe no se base en emociones o circunstancias, sino en la inmutable verdad de la Palabra de Dios.
