La Cuarta Bestia y la Profecía Bíblica
Bienvenidos a un nuevo episodio de Palabras Proféticas, donde nos adentramos en las Escrituras para desentrañar los misterios del futuro. Hoy, el Pastor Miguel Díez nos guía a través de un pasaje clave de la profecía bíblica: la enigmática «Cuarta y Última Bestia», mencionada en Daniel 7:7. Sin duda, esta figura destaca de manera sorprendente por su descripción y lo que representa para el fin de los tiempos.
Una Bestia Diferente a Todas las Demás
Daniel 7:7 nos presenta una visión impactante: «Después de esto, miraba yo en las visiones de la noche, y he aquí la cuarta bestia espantosa y terrible, y en gran manera fuerte, la cual tenía unos dientes grandes de hierro; devoraba y desmenuzaba, y las sobras hollaba con sus pies; y era muy diferente de todas las bestias que vi antes de ella, y tenía diez cuernos.»
¿Qué podemos discernir de esta descripción? En primer lugar, es evidente que esta bestia es mucho más terrorífica, aniquiladora, devastadora y cruel que cualquier otra vista antes, tanto en vidas como en haciendas. Aquellos que profetizan sobre este monstruo, a menudo asociándolo con un imperio romano renacido o el último gobierno de Satanás en el mundo, encuentran una confirmación en la propia Biblia. Daniel 7:23 lo reafirma: «Dijo así: La cuarta bestia será un cuarto reino en la tierra, el cual será diferente de todos los otros reinos, y a toda la tierra devorará, trillará y despedazará.» Esta bestia no es solo un reino más; es una entidad sin precedentes en la historia de la humanidad.
Los Diez Cuernos y el Anticristo: Un Dominio Global
La profecía continúa detallando que los diez cuernos de esta bestia representan diez reyes que se levantarán de ese reino. Pero la advertencia más escalofriante viene después: «y tras ellos se levantará otro, el cual será diferente de los primeros, y a tres reyes derribará.» Este «otro» es una clara referencia al Anticristo.
Este dictador mundial tomará un dominio total sobre la Tierra. ¿Cómo será esto posible? La Escritura revela que Dios soltará a los principados y potestades diabólicas, llenando de violencia a los dirigentes de todas las naciones. Despertarán odios acumulados en sus historias pasadas, llevándolos a compulsivas venganzas, especialmente contra sus vecinos más cercanos. De esta manera, el mandato principal de amar al prójimo será completamente deshecho.
La Tercera Guerra Mundial y el Resurgimiento de la Violencia Pre-Diluviana
Esta situación nos lleva directamente a la profecía apocalíptica de Jesucristo sobre la Tercera Guerra Mundial, descrita en Mateo 24:6-7: «Y oiréis de guerras y rumores de guerras; mirad que no os turbéis, porque es necesario que todo esto acontezca; pero aún no es el fin. Porque se levantará nación contra nación, y reino contra reino; y habrá pestes, y hambres, y terremotos en diferentes lugares.»
Esta descripción de «todos contra todos» nos remite a la situación de la humanidad antes del diluvio, un período de violencia universal, como lo relata Génesis 6:11-13: «Y se corrompió la tierra delante de Dios, y estaba la tierra llena de violencia. Y miró Dios la tierra, y he aquí que estaba corrompida; porque toda carne había corrompido su camino sobre la tierra. Dijo, pues, Dios a Noé: He decidido el fin de todo ser, porque la tierra está llena de violencia a causa de ellos; y he aquí que yo los destruiré con la tierra.»
El Plan Divino de Juicio y Venganza Santa
La última bestia cumple el plan divino profetizado en numerosas escrituras bíblicas, que advierten de los juicios y venganzas santas de Dios. Jeremías 25:17-26 menciona un gran número de naciones que sufrirán una inmensa mortandad bajo la ferocidad de este monstruo final, dirigido por el último Anticristo. La lista es extensa y abarca desde Jerusalén y las ciudades de Judá hasta Egipto, Filistea, Edom, Moab, Amón, Tiro, Sidón, Arabia, Elam, Media, y «todos los reinos del mundo que están sobre la faz de la tierra». Un sinfín de países involucrados en esta debacle global.
El Engaño del Anticristo y la Victoria de la Fe
Ante tal mortandad y terror, el Anticristo, el último gobernante de Satanás, establecerá un dominio por siete años. Sin embargo, su control se verá quebrantado a los tres años y medio, a partir de la ruptura del «pacto de la muerte» con Israel. Este dictador mundial habrá engañado a la mayoría de la humanidad desesperada, prometiendo prosperidad, paz y protección. Pero sus promesas serán vacías, pues solo Dios puede otorgar la verdadera prosperidad y paz. El Anticristo es un instrumento de aquel que solo busca robar, matar y destruir.
A pesar de su infernal dictadura, el Anticristo no podrá someter a aquellos que permanezcan firmes en la fe de Cristo. La iglesia verdadera tendrá refugio y protección, como promete Apocalipsis. Aunque algunos mártires serán designados para dar testimonio total de fidelidad hasta la muerte, los verdaderos seguidores de Cristo serán protegidos y recibirán la victoria eterna, incluso venciendo al Anticristo en el sentido de que no podrá alcanzarlos.
Reflexión Final:
Las profecías sobre la Cuarta y Última Bestia nos invitan a una profunda reflexión sobre los tiempos finales. Nos recuerdan la soberanía de Dios y la importancia de permanecer firmes en la fe en medio de la tribulación. Mientras el mundo se prepara para enfrentar la manifestación de este poder devastador, la esperanza reside en la protección divina y la victoria final de Cristo.
Miguel Díez es presidente de la ONG Remar en 68 países y fundador de la iglesia Cuerpo de Cristo.