El significado de las puertas en la biblia // Estamos Contigo
Puertas de la Gracia de Dios
La gracia de Dios se presenta como un refugio, un lugar donde encontramos paz, perdón y regeneración. En tiempos de incertidumbre y desafíos, Dios nos exhorta a mejorar nuestros caminos y obras, alejándonos de las palabras de mentira y la hipocresía religiosa. No son las puertas de los templos físicos las que importan, sino las puertas de bondad, justicia, amor y misericordia que Él ha abierto para nosotros.
La Gracia de Dios en Nuestras Vidas
Las puertas de la gracia de Dios son donde Él habita y donde podemos recibir Su presencia transformadora. En el lugar santísimo del templo celestial, Dios anhela encontrarse con Su pueblo. Las 12 puertas de la Jerusalén celestial representan las bendiciones divinas, y la puerta del este simboliza a Cristo, quien es la entrada al trono de la gracia. En Apocalipsis 21:21-23, se describe la ciudad celestial con puertas de perlas y calles de oro, iluminada por la gloria de Dios, recordándonos la magnificencia de Su reino.
Oportunidades para Hablar de Jesús
En cada celebración, especialmente durante las fiestas, se abren puertas familiares y de amistad, muchas veces utilizadas para actividades mundanas. Sin embargo, estas son oportunidades valiosas para compartir el regalo más grande de la humanidad: Jesucristo. Isaías 26:2 nos anima a abrir las puertas para que entren aquellos que buscan justicia. Es fundamental que abramos nuestros corazones, hogares e instituciones para recibir a los mensajeros de la verdadera paz y proclamemos el nombre de Jesús, quien ofrece salvación y vida eterna.
Puertas Abiertas para la Obra de Dios
Dios ha abierto puertas inefables en lugares como Ucrania, Polonia y Rumanía, permitiéndonos compartir el mensaje de Cristo y brindar ayuda a los necesitados. En África, hemos visto milagros y oportunidades para servir a aquellos que más lo necesitan. Es un llamado a ser valientes y entrar por las puertas que Dios abre, proclamando Su salvación y provisión.
Llamado a la Obediencia y la Oración
La perseverancia en la oración es crucial. Debemos orar con acción de gracias, intercediendo por aquellos que aún no conocen a Cristo. Cada puerta que se nos abre es una oportunidad para dar a conocer el misterio de Cristo. Como discípulos obedientes, estamos llamados a cumplir la Gran Comisión y a mantener nuestras vidas abiertas para recibir y ayudar a quienes lo necesiten.
Llamado al Arrepentimiento y la Transformación
Dios nos llama a salir de las iglesias contaminadas por viejas levaduras. Debemos permitir que el Espíritu Santo nos dé la victoria sobre el ego y la manipulación de la verdad. Al obedecer este llamado, experimentaremos la llenura del amor de Dios, la salvación y el gozo de Jesucristo. Oremos para que el Espíritu Santo traiga convicción al mundo, ayudando a las personas a ver y buscar al Señor.
Conclusión
Abrir nuestras vidas y corazones a la obra de Dios es esencial en estos tiempos. Que nuestras palabras y acciones reflejen la luz de Cristo, llevando esperanza y transformación a quienes nos rodean. Oremos para que Dios use nuestras vidas para abrir puertas, tocar conciencias y ser instrumentos de Su gracia. Que Su luz brille a través de nosotros, bendiciendo a nuestro país, Su iglesia y Su pueblo.
