Los Misterios de Dios: Revelaciones para los Últimos Tiempos
Dios ha prometido en su Palabra que nada hará sin antes revelarlo a sus siervos los profetas (Amós 3:7). En esta predicación vibrante, Miguel Díez nos guía a través de los grandes misterios del Reino, del juicio, de la redención y del tiempo final. Una enseñanza para los que tienen hambre de la verdad profética y anhelan caminar en revelación.
La ciencia avanza… pero no conoce a Dios
Daniel 12:4 – “Muchos correrán de aquí para allá, y la ciencia se aumentará.”
Estamos viviendo el cumplimiento literal de la profecía de Daniel. La ciencia ha aumentado, pero su conocimiento está divorciado de la verdad de Dios. Miguel Díez denuncia que los avances como el 5G, los satélites y la inteligencia artificial no son neutros: muchos están al servicio del control global. A esto lo llaman “el ojo de Dios”, pero Dios se burla de su arrogancia. Una explosión solar puede borrar sus sistemas en segundos.
Mientras los científicos buscan respuestas en el polvo cósmico, el creyente recibe revelaciones desde el cielo. No hay microscopio que revele lo que el Espíritu puede mostrar al humilde que clama: “Señor, revélame tus misterios”.
Misterios que el mundo no conoce, pero la Iglesia sí
1 Corintios 2:9-10 – “Cosas que ojo no vio, ni oído oyó… Dios nos las reveló a nosotros por el Espíritu.”
El mundo vive ciego ante preguntas fundamentales: ¿qué es la verdad?, ¿qué es la muerte?, ¿qué hay más allá del sepulcro? Pero nosotros, los nacidos de nuevo, lo sabemos. Miguel afirma: “Yo vivo con la visión del Reino desde hace 40 años”. Tenemos la ciudadanía celestial y somos embajadores del Reino eterno.
Lo que el mundo llama “misterio”, Dios lo hace conocimiento revelado para sus hijos. Sabemos quiénes somos, hacia dónde vamos y qué está por venir. El Reino de Dios es justicia, paz y gozo en el Espíritu Santo (Romanos 14:17), y ya se está manifestando en nosotros.
La creación como trampa para Satanás
Génesis 3:15 – “Y pondré enemistad entre ti y la mujer, y entre tu simiente y la simiente suya.”
Una revelación sorprendente de Miguel Díez es que la creación fue diseñada también como una trampa divina. En el cielo no había ley que pudiera juzgar a Satanás, pero al tentar a Adán y Eva, el diablo se convierte en autor intelectual del pecado. ¡Quedó atrapado por la ley de Dios sobre la tierra!
Esta revelación nos ayuda a entender que el juicio está en marcha, y que nosotros, los redimidos, seremos los que juzguen al enemigo:
1 Corintios 6:3 – “¿No sabéis que hemos de juzgar a los ángeles?”
El misterio del Evangelio y del Reino
Efesios 6:19 – “Para que al abrir mi boca me sea dada palabra… para dar a conocer con denuedo el misterio del evangelio.”
El evangelio es un misterio para los incrédulos, pero es la buena nueva que transforma el alma. Cristo vino no solo a redimirnos, sino a establecer su Reino en nosotros y, al final, en la tierra.
Apocalipsis 20:4 – “…y vivieron y reinaron con Cristo mil años.”
Este Reino no es simbólico, sino literal. Vendrá el tiempo cuando Jesús reine desde Jerusalén, y nosotros reinaremos con Él.
Romanos 8:19 – “Porque el anhelo ardiente de la creación es el aguardar la manifestación de los hijos de Dios.”
El misterio de la iniquidad y el Anticristo
2 Tesalonicenses 2:3-7 – “Porque ya está en acción el misterio de la iniquidad.”
Este misterio opera desde el Edén, pero se intensifica en los últimos tiempos. Satanás ha tomado control del mundo a través del pecado del hombre, pero su fin está decretado. Se levantará el hombre de pecado, el hijo de perdición, y se sentará en el templo como si fuera Dios.
El espíritu del anticristo ya está obrando, dice Miguel, y muchos no están preparados. El que lo detiene es el Espíritu Santo. Cuando Él se retire, comenzará la gran tribulación. No se trata de si sufriremos, sino de si seremos fieles.
Babilonia: la madre de las rameras
Apocalipsis 17:5 – “Y en su frente un nombre escrito: un misterio: Babilonia la grande, la madre de las rameras.”
La gran ramera representa el sistema religioso apóstata, el falso ecumenismo y la unión de religiones bajo el poder político del anticristo. Miguel señala que este sistema ya se está formando y podría estar encabezado por fuerzas islámicas y católicas, con apoyo económico desde la Meca.
Esta Babilonia está ebria de la sangre de los santos. Será usada por la bestia y luego destruida por ella misma. Es el sistema global que reemplaza la verdad por el consenso religioso y la idolatría institucionalizada.
El misterio de la resurrección y la transformación
1 Corintios 15:51-52 – “He aquí os digo un misterio… todos seremos transformados.”
La resurrección es uno de los mayores misterios revelados. Jesús venció la muerte, y esa victoria es nuestra herencia. Cuando suene la última trompeta, los muertos en Cristo resucitarán, y los que estemos vivos seremos transformados.
Nuestro cuerpo corruptible se convertirá en un cuerpo de gloria, inmortal, como el de Jesús.
Filipenses 3:21 – “…transformará el cuerpo de la humillación nuestra, para que sea semejante al cuerpo de la gloria suya…”
El misterio de la unidad del Cuerpo de Cristo
Efesios 1:9-10 – “…de reunir todas las cosas en Cristo, así las que están en los cielos, como las que están en la tierra.”
Dios se ha propuesto reunir su Iglesia en una sola, purificada y unida. Miguel Díez clama por este misterio de unidad: que judíos y gentiles, congregaciones y ministerios, se unan bajo un solo Señor.
Juan 17:21 – “Para que todos sean uno; como tú, oh Padre, en mí, y yo en ti…”
Solo con unidad espiritual podremos resistir la persecución final y no ser absorbidos por la Babilonia religiosa.
El misterio de la revelación profética
Apocalipsis 10:7 – “…cuando el séptimo ángel comience a tocar la trompeta, el misterio de Dios se consumará.”
Dios está revelando misterios hoy como nunca antes. Las profecías se están cumpliendo, y el pueblo que tiene oído espiritual las está discerniendo. Miguel llama a recibir revelación sobre el anticristo, sobre los juicios venideros, y sobre los tiempos finales.
Daniel 2:22 – “Él revela lo profundo y lo escondido; conoce lo que está en tinieblas, y con él mora la luz.”
Conclusión: Pide revelación, vive en santidad
Dios quiere mostrar sus secretos a quienes le buscan en intimidad. No para entretener la mente, sino para preparar nuestras vidas para lo que ha de venir. Hay misterios que aún están ocultos, esperando corazones humildes y hambrientos. El Espíritu Santo es el maestro que nos los revelará.
Proverbios 25:2 – “Gloria de Dios es encubrir un asunto; pero honra del rey es escudriñarlo.”
Miguel Díez es presidente de la ONG Remar en 68 países y fundador de la iglesia Cuerpo de Cristo.
