Profecías Bíblicas: Un llamado urgente a discernir los tiempos // Programa 51
En esta nueva entrega de Palabras Proféticas, iniciamos una etapa renovada del programa con un mensaje claro y directo: “Profeticemos”. Vivimos tiempos donde la necesidad de discernir las profecías bíblicas no es opcional, sino vital. La Iglesia necesita volver su oído al Espíritu Santo, escudriñar la Palabra, y entender lo que viene. Porque Dios sigue preguntando, sigue desafiándonos:
“¿Quién proclamará lo venidero?” (Isaías 44:6-7)
Este mensaje no solo es una reflexión, es una declaración profética. Creemos firmemente que el Señor levantará en estos días varones profetas, como Enoc y Elías, anunciando lo que ha de venir. Serán hombres íntegros, consagrados, de los cuales se dirá lo mismo que dijeron de Daniel: “No hallaremos ocasión alguna para acusarle, si no la hallamos contra él en la ley de su Dios.” (Daniel 6:5)
Profecía y Guerra: Lo que el mundo no quiere ver
En capítulos anteriores, señalamos causas espirituales que desataron guerras como la de Rusia y Ucrania. Las naciones provocaron a Dios, ignoraron su ley, y soltaron fuerzas demoníacas de destrucción. También anunciamos el fracaso de alianzas humanas como la OTAN, que no podrán detener lo que Dios ha decretado para las naciones que se levanten contra su propósito.
Tal como lo profetizó Ezequiel, el castigo final será para el Gog de Magog, cuando intente invadir a Israel. Esta guerra no es casualidad. Es parte del plan divino que quebranta a Europa, Rusia, Reino Unido y a los poderes económicos mundiales. Dios está golpeando el corazón de los imperios: su economía.
Y como consecuencia, se está formando una Europa federal, con ejército y banco común. Pero detrás de esta aparente unidad está el precio de la soberanía entregada. La deuda se convierte en chantaje, y el control financiero será la herramienta para someter a las naciones.
Dios ruge como un guerrero
El Señor, que ha callado por siglos, ahora se levanta:
“Yahveh saldrá como gigante… gritará, voceará, se esforzará sobre sus enemigos.” (Isaías 42:13)
Es tiempo de juicio, pero también de redención. Mientras las naciones se estremecen, muchos verán la luz en medio de las tinieblas. Lo escabroso se convertirá en llanura, y lo torcido se enderezará para dar paso a la gran manifestación del Reino de Dios.
Este quebrantamiento traerá milagros, sanidades, liberaciones, y sobre todo, una gran cosecha de almas. En medio del dolor de la guerra, millones caerán de rodillas y reconocerán que solo en Dios hay refugio.
El Reino que viene
Todo esto nos prepara para el establecimiento del Reino Milenial de Jesucristo. Él ya reina, pero viene a culminar su obra en la tierra.
“Estad quietos, y conoced que yo soy Dios; seré exaltado entre las naciones…” (Salmo 46)
Las guerras cesarán, los carros serán quemados, y Yahveh será enaltecido. En medio del caos, Dios dará Shabbat, descanso, paz, confianza. Porque Él está con nosotros, y su refugio es perfecto.
Palabras Proféticas no es solo un programa. Es una voz que clama en medio del desierto de este mundo, llamando a preparar el camino al Rey. Porque el tiempo se acorta, y su regreso está cerca. ¡Profeticemos!
Miguel Díez es director de la ONG Remar y fundador de la iglesia Cuerpo de Cristo con obra e iglesias en 72 países.