El Cuerno Pequeño: Revelaciones proféticas en los tiempos del fin
«Mientras yo contemplaba los cuernos, he aquí que otro cuerno pequeño salía entre ellos…» (Daniel 7:8)
Uno de los misterios proféticos más debatidos en el ámbito escatológico es el del «cuerno pequeño», descrito por el profeta Daniel. Este símbolo encierra una profunda revelación sobre los movimientos del espíritu del Anticristo a lo largo de la historia y su manifestación final en los tiempos postreros.
El patrón repetido del mal
La profecía en la Biblia no suele limitarse a un solo cumplimiento. Al contrario, muchas veces se manifiesta en etapas, en figuras históricas que prefiguran lo que ha de venir. Así ha sido con los llamados «cuernos pequeños», instrumentos humanos del reino de las tinieblas, que aunque permitidos por Dios, han ejecutado obras de maldad contra Su pueblo.
Uno de los más notables fue Antíoco IV Epífanes, el tirano seléucida que profanó el templo de Jerusalén, sacrificó cerdos sobre el altar santo y obligó a adorar a Júpiter bajo pena de muerte. Su figura es una clara prefiguración del Anticristo venidero. Pero Dios levantó a los Macabeos, siete hermanos valientes que, con su fe y fuerza, lograron liberar a Israel del yugo de este tirano durante 90 años.
Cuernos pequeños en la historia reciente
En el siglo XX, otro «cuerno pequeño» surgió con rasgos similares: Yasser Arafat. Autodenominado presidente palestino, nacido en Egipto, falsificó sus orígenes para proyectar autoridad sobre Jerusalén. Su legado fue uno de terror, manipulación y destrucción, desde Jordania hasta el Líbano, fortaleciendo a grupos como Hamas y dejando un legado sangriento, culminando con el absurdo de recibir el Premio Nobel de la Paz.
Tras su derrota, surgió como reacción Hezbolá, con apoyo de Irán y otros países, una fuerza paramilitar que continúa sembrando caos en la región. Sin embargo, la superioridad tecnológica de Israel ha ido desmontando sus estructuras de poder.
El cuerno pequeño del fin
Daniel 7:24 señala que tras diez reyes se levantará otro, diferente, que derribará a tres. Miguel Díez plantea una interpretación profética moderna: el actual Yemen, con su ejército terrorista hutí, podría ser una representación del cuerno pequeño final. Desde esta región estratégica, ataca a Israel, lanza misiles, y bloquea rutas comerciales vitales del mundo. Su financiamiento viene de Irán y Pakistán, y su odio hacia el pueblo de Dios es manifiesto.
Sin embargo, todos los enemigos históricos de Israel han caído, y así seguirá siendo. El juicio de Dios se ha cumplido una y otra vez. Imperios que parecían invencibles hoy yacen en ruinas.
La esperanza en medio de la oscuridad
Isaías 26:10-12 nos recuerda que aunque el malvado no aprenda justicia, el fuego de Dios consumirá a los enemigos de Su pueblo. El único que puede dar verdadera paz, Shalom, es Jesucristo, el Mesías judío. Él es el dador de la paz eterna, que no depende de las circunstancias ni de tratados humanos.
Recíbela.
Miguel Díez es presidente de la ONG Remar en 68 países y fundador de la iglesia Cuerpo de Cristo.