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Señales Proféticas – Los Desastres Naturales

Señales Proféticas sobre las Desastres Naturales

En el programa «Palabras Proféticas», Miguel Díez expone el cumplimiento de las profecías bíblicas en relación con los desastres naturales. En tiempos recientes, los terremotos, erupciones volcánicas y otros fenómenos han aumentado en frecuencia e intensidad, recordándonos que las Escrituras ya advertían sobre estos eventos como señales del fin de los tiempos.

Señales Proféticas en las Escrituras

El libro de Apocalipsis describe con precisión eventos catastróficos que marcarán los últimos tiempos. En Apocalipsis 6:12, se menciona:

«Miré cuando abrió el sexto sello, y he aquí hubo un gran terremoto, y el sol se puso negro como tela de cilicio, y la luna se volvió toda como sangre.»

Este pasaje profetiza un periodo en el que la naturaleza misma será sacudida, con terremotos que provocarán densas nubes de polvo y oscuridad sobre la tierra.

Juicio de Dios a Través de los Desastres

Los desastres naturales no solo son advertencias, sino que también pueden ser juicios divinos. Miqueas 1:2-4 nos habla de la intervención directa de Dios:

«Porque he aquí, Yahveh sale de su lugar, y descenderá y hollará las alturas de la tierra, y se derretirán los montes debajo de él, y los valles se hundirán como la cera delante del fuego.»

Dios usa estos eventos para llamar al arrepentimiento a aquellos que han endurecido su corazón y han ignorado Su palabra.

Terremotos en Lugares Inesperados

Mateo 24:7-8 señala que «habrá pestes y hambres y terremotos en diferentes lugares». Aunque algunos países han sido históricamente propensos a sismos, la profecía indica que temblores ocurrirán en naciones que nunca los han experimentado, sorprendiendo a sus habitantes y llevándolos a reconocer la soberanía de Dios.

El Poder de la Oración en Medio del Juicio

Los creyentes pueden interceder para que Dios traiga justicia a la tierra. En Apocalipsis 8:1-5 se menciona cómo las oraciones de los santos son tomadas por un ángel y luego arrojadas a la tierra, provocando truenos, relámpagos y terremotos.

Jesucristo y los Terremotos

Cristo mismo vinculó su obra con los terremotos. Cuando Él murió en la cruz, la tierra tembló, el velo del templo se rasgó y las tumbas se abrieron (Mateo 27:50-54). De la misma manera, en Su segunda venida, un gran terremoto marcará el inicio de su reinado milenial (Zacarías 14:4).

El Mayor Terremoto de la Historia

Apocalipsis 16:17-20 profetiza el terremoto más grande jamás registrado, que dividirá la gran ciudad en tres partes y hará desaparecer montes e islas:

«Y hubo un gran temblor de tierra, un terremoto tan grande cual no lo hubo jamás desde que los hombres han estado sobre la tierra.»

El Propósito de los Desastres: Salvación de Almas

Aunque los desastres naturales traen dolor y destrucción, también pueden llevar a muchos al arrepentimiento. En países como Guatemala y México, grandes terremotos han sido seguidos por movimientos de avivamiento donde miles han entregado su vida a Cristo.

La verdadera seguridad no está en evitar catástrofes, sino en permanecer firmes en Cristo. Como dice el Salmo 91, «caerán a tu lado mil y diez mil a tu diestra, mas a ti no llegará».

Reflexión Final

Los desastres naturales no son solo fenómenos aleatorios, sino señales proféticas y oportunidades para que la humanidad vuelva su corazón a Dios. Como el centurión que presenció el terremoto en el Gólgota y exclamó: «Verdaderamente este era Hijo de Dios», nuestra reacción ante estos eventos debe ser la misma: reconocer que Cristo es el único Salvador y nuestra única esperanza en tiempos de tribulación.

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