Predicación de salvación // Evangelismo en las calles.
Predicación de salvación en las calles de Zaragoza – España, seguimos predicando el evangelio a toda creatura como nos mandó Jesucristo.
La Importancia de la Salvación
La salvación de las almas es el propósito central del mensaje cristiano, y solo Cristo puede otorgarla. Es un regalo divino que transforma vidas y abre las puertas del cielo. Como creyentes, predicamos el evangelio con gozo y pasión porque sabemos que es el camino para alcanzar la vida eterna.
Una de las declaraciones más profundas de la buena nueva se encuentra en Juan 3:16: “Porque de tal manera amó Dios al mundo, que ha dado a su Hijo unigénito, para que todo aquel que en él cree no se pierda, mas tenga vida eterna”. Estas palabras encapsulan el amor de Dios y el poder salvador de Jesucristo.
Jesús, el Único Camino al Padre
Jesús es el único camino al Padre. No hay otro nombre dado a los hombres por el cual podamos ser salvos. Su sacrificio en la cruz nos reconcilia con Dios y nos ofrece una relación directa con Él.
Por medio de la fe en Jesucristo, nos convertimos en hijos de Dios. Él murió en la cruz para pagar por nuestros pecados y abrirnos las puertas a la vida eterna. Si lo aceptamos como nuestro Señor y Salvador, seremos liberados del pecado y de la condenación eterna.
El Arrepentimiento y la Conversión
Todos hemos pecado y estamos destituidos de la gloria de Dios. La Biblia nos enseña que el primer paso hacia la salvación es el arrepentimiento. Esto implica reconocer nuestros pecados, lamentarlos y decidir volvernos a Dios con corazón sincero.
Dios es misericordioso y está dispuesto a perdonar a quienes se arrepienten de verdad. Su amor y gracia están siempre disponibles para aquellos que lo buscan. Como dice Isaías 55:6: “Buscad a Jehová mientras puede ser hallado, llamadle en tanto que está cercano”. Dios quiere que cada persona experimente su amor y su perdón.
La Invitación a Cristo
La salvación es un regalo que requiere ser aceptado. Hoy es el día de tomar la decisión de seguir a Cristo y renovar nuestro pacto con Él. Vivir con esperanza en Cristo es infinitamente mejor que enfrentar la vida sin ella. En Cristo encontramos luz, paz y dirección en medio de las tinieblas y la angustia.
Si aún no has entregado tu vida a Cristo, te animo a que lo hagas hoy. Jesús es el buen pastor que dio su vida por sus ovejas, el amigo fiel que nunca nos abandona. Cierra tus ojos y haz una oración sincera, pidiéndole que te limpie de toda maldad, te perdone y te tome como suyo.
Oración: “Señor Jesús, te doy gracias por tu amor infinito. Reconozco que soy pecador y necesito tu perdón. Te entrego mi vida y te acepto como mi Señor y Salvador. Límpiame de mis pecados, renueva mi corazón y lléname de tu paz. Gracias por dar tu vida por mí y por ser mi Rey eterno. Amén.”
Que este sea el inicio de una vida nueva en Cristo, llena de su amor y su guía.